Un día con dolor de espalda agudo

Un día con dolor de espalda agudo

octubre 14, 2013

A todos nos ha pasado: te estás preparando por la mañana, a punto de tener un día estupendo y productivo, y de repente un resbalón en la ducha te tensa algo en la espalda y te ves incapaz de moverte. O, la noche anterior, ordenando después de un largo día de actividad física, tal vez levantando algo un poco demasiado pesado y sabiendo que lo pagaría durante el siguiente rato. O tal vez ha pasado demasiado tiempo encorvado frente al ordenador, con la espalda arqueada en esa conocida joroba. Tu cuerpo ya ha tenido suficiente. Bienvenido a un día con dolor de espalda.

Aunque por lo general esto significa quedarse tumbado en una superficie plana con una compresa caliente y un poco de ibuprofeno, pensando en nuevas combinaciones de maldiciones para tus músculos doloridos, hay algunas cosas que puedes hacer durante un día con dolor de espalda agudo que no sólo harán que el tiempo pase más deprisa, sino que también podrían ayudarte a curarte más rápidamente.

Distraerse del dolor

Mantener el cerebro ocupado no sólo le permitirá olvidarse de sus molestias, sino que distraerse puede reducir la cantidad de dolor que experimenta. Investigadores del Centro Médico Universitario de Hamburgo-Eppendorf descubrieron que, en realidad, el cerebro percibe menos dolor y la columna vertebral envía menos señales de dolor cuanto más trabaja el cerebro. Lee un libro absorbente o sumérgete en un maratón de películas: cualquier cosa que mantenga tu mente activa y alejada de esa molesta punzada de dolor que estás experimentando.

Muévase todo lo que pueda

No te exijas demasiado, pero cualquier movimiento normal que seas capaz de hacer te ayudará a estirar los músculos y mantenerlos ágiles, y en última instancia te ayudará a recuperarte más rápidamente. Hacer algunos estiramientos ligeros, tanto como puedas tolerar, también te ayudará.

Relájese

Aunque estar tumbado sin hacer gran cosa puede sonar suficientemente relajante, hacer un esfuerzo activo y consciente para relajarse puede ayudar a disminuir los espasmos y aliviar el dolor. Los ejercicios de respiración profunda y las cintas de relajación son una buena forma de empezar, al igual que la meditación y otros ejercicios de visualización guiada.

No sea demasiado duro consigo mismo

El dolor es una experiencia totalmente subjetiva. Nadie siente el dolor exactamente igual y, por tanto, cada persona reacciona al dolor de forma diferente. Si el dolor que sientes es intenso o muy angustioso, no sientas que tienes que presionarte para superarlo o que deberías ser más duro. Escucha a tu cuerpo y date tiempo y espacio para curarte. Y, por supuesto, si alguna vez le preocupa el tipo o la intensidad del dolor que siente, no deje de acudir al médico.

Aunque un día con dolor de espalda no es una experiencia agradable, hay algunas cosas que puede hacer para acortar el tiempo de recuperación y mantener la mente ocupada mientras se recupera.

Y una vez que te hayas recuperado (¡literalmente!), puedes plantearte hacer una serie de estiramientos para la espalda o el cuello de forma regular. Estirar y fortalecer los músculos de esta zona no sólo beneficiará a su espalda, sino también a su postura y amplitud de movimiento en general.

Your Journey to Pain Relief

App tracks progress. Step by step guide to pain relief and prevention.

Show results

Free Newsletter

Stay in the know. Our blogs are written by orthopaedic surgeons.