Dolor de espalda 101

¿Qué es el dolor de espalda?

El dolor de espalda es una de las dolencias físicas más frecuentes que la gente lleva al médico. Según la Asociación Americana de Médicos de Familia, el dolor de espalda es el quinto motivo más frecuente de visita al médico: el 90% de la población adulta sufre dolor de espalda en algún momento de su vida, y el 50% lo padece al menos una vez al año.

El dolor de espalda puede ser crónico o agudo, leve o intenso, pasajero o persistente. Aunque el dolor de espalda es muy frecuente, puede ser una afección molesta que le impida trabajar, moverse con normalidad y, en general, disfrutar.

¿Cuáles son los principales síntomas del dolor de espalda?

El dolor de espalda adopta muchas formas, desde un dolor sordo y persistente hasta dolores agudos y punzantes o una sensación de quemazón. Muchas personas también experimentan entumecimiento, hormigueo o debilidad, así como malestar general. Dado que el dolor de espalda puede estar causado por una lesión, infección o enfermedad en cualquier parte de los músculos, nervios, tendones y huesos de la columna vertebral, el dolor de espalda tiene tendencia a irradiarse y afectar también a otras partes del cuerpo. Muchas personas experimentan también sensaciones incómodas o dolor en brazos y piernas, mientras que el dolor en la parte superior de la espalda puede afectar a los hombros y a veces ir acompañado de dolor de cabeza.

¿Qué causa el dolor de espalda?

El dolor de espalda abarca una amplia gama de afecciones y, por tanto, un conjunto igualmente amplio de causas.
El dolor de espalda suele clasificarse en cuatro categorías, definidas por la parte de la espalda en la que se produce el dolor
se origina:

1. Dolor de cuello, que afecta a la columna cervical;
2. El dolor de espalda medio, que se debe a problemas de la columna torácica;
3. Lumbalgia, la forma más común de dolor de espalda, que afecta a la columna lumbar;
4. Dolor de rabadilla, que procede de la columna sacra y puede afectar también a la pelvis.

Por suerte, la mayoría de los incidentes de dolor de espalda (hasta el 98% según la AAFP) no tienen ninguna patología subyacente importante, lo que significa que no hay ninguna causa grave más allá de una lesión o inflamación leve. A los pacientes que no tienen una causa fundamental del dolor de espalda se les suele diagnosticar un dolor inespecífico.
dolor de espalda agudo.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el dolor de espalda?

Aunque la mayoría de las causas del dolor de espalda son benignas, es importante obtener un diagnóstico preciso de lo que lo está provocando para poder tratarlo adecuadamente. Siempre es importante descartar una enfermedad subyacente importante. Si no hay ninguna enfermedad o lesión importante detrás de su dolor de espalda, entonces el dolor de espalda suele estar causado por distensiones musculares, espasmos musculares y desequilibrios musculares en la espalda.

Los antiinflamatorios de venta sin receta pueden reducir el dolor y la hinchazón temporalmente, y la terapia con calor y los masajes también pueden proporcionar alivio. Para opciones de tratamiento a largo plazo que eviten la reaparición del dolor de espalda, la terapia de ejercicios en casa puede fortalecer los músculos de la espalda para ayudar a prevenir lesiones y proporcionar más apoyo a los nervios y la columna vertebral.